Las creencias limitantes se fundamentan en la información que el ser humano ha asumido como cierta, porqué se la han inculcado de pequeños, en el entorno familiar y social donde ha crecido, sin olvidar la importancia que tiene la escuela en este proceso. Son patrones que llevan a creer al ser humano que ciertas cosas no se pueden hacer o no se deben, porqué está mal visto, porqué saldrá mal, porqué eso no se hace, porqué no es correcto, porqué es una locura, porqué no existe…
Todas estas creencias limitantes y patrones son proyecciones que se realizan en el momento de la educación de los niños, educándolos desde el punto equivocado de su evolución, ya sea en en seno familiar o escolar.
Los niños (hijos) son maestros, seres de luz cada vez con vibraciones más elevadas que vienen a mostrarnos aquello que hemos de sanar en cada uno de nosotros para nuestra evolución individual, familiar y social.
Además de traer consigo este mensaje magistral, cada uno de ellos responde a una esencia diversa con un plan de vida único que refleja en cada acción de su día a día. Para que podamos descubrir y respetar su plan de vida, primero hemos de sanar en nosotros mismos aquello que nos muestra mediante su mensaje magistral, para liberarnos y darle la libertad de evolución a su esencia.
Cuando no se escucha su mensaje de sanación, el niño es educado bajo las creencias limitantes de los padres, proyectando las insatisfacciones y planes de vida no resueltos de los padres en la educación del niño. De esta forma no se permite que el niño sienta el respeto, descubrimiento y aceptación de su propio ser (esencia). Evolucionando en estados de insatisfacción y ansiedad, rapidez e inmadurez, desorientación, falta de comunicación y de recursos para expresar su plan de vida que su alma nunca olvida pero su mente no recuerda. El niño somatiza esta desorientación con miedos, nerviosismo, exceso de actividad, baja autoestima, falta de concentración y agresividad llegando incluso al «bullying»
En LA CALMA DE LA ESENCIA brindamos la gran oportunidad a niños y padres a descubrir todos estos mensajes, maestrías, esencias y proyecciones para hacer una evolución en conjunto. El echo de que el niño pueda evolucionar junto a la familia es un acto maravilloso para ambos, permitiendo que cada uno conecte con su verdadera esencia y así crear un acompañamiento desde el respeto y el amor incondicional.
Joanna Coronado, fundadora de La Calma de la Esencia y la educación integrativa. www.lacalmadelaesencia.com
Joanna@lacalmadelaesencia.com
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